Las administraciones (AEAT, SS, etc.) nos están acostumbrando de vez en cuando, a comprobar donde esta el límite del asedio y el acoso a las empresas y los autónomos; además volver a situarnos solamente por el hecho de ejercer una actividad económica como defraudadores o explotadores desde el punto de partida.
El plan estratégico de la Inspección de Trabajo contemplaba entre otros ejes para este año, junto a los planes de igualdad, registros salariales, etc.; la vigilancia de los contratos a tiempo parcial efectuados por las empresas.
Con ese motivo, las empresas ya han empezado a recibir cartas con «invitaciones» a regularizar la situación de los trabajadores que se encuentren contratados con este tipo de contratos, si su jornada no se corresponde con los datos obrantes en su afiliación; y casi como de una moderna invitación a una boda donde junto a la fecha del convite te dan el número de cuenta para realizar tu regalo, la SS te indica que puedes realizar el pago a través de una liquidación complementaria, junto a los recargos correspondientes; y que en caso de no realizarlo, será la propia Inspección la que pondrá toda su maquinaria en marcha para detectar cualquier tipo de fraude…
Ante esta nueva situación de inquietud de las empresas recomendamos que sea tomada como una oportunidad para revisar la situación de los trabajadores; esta debería revisar y comprobar que los registros de jornada se adecuen a lo estipulado en el contrato de trabajo y que los descansos y la jornada laboral en cómputos anuales, sea la equivalente al porcentaje consignado como parcialidad en su contrato de trabajo y en su situación de afiliado del trabajador. De esta forma podrá asegurarse de estar realizando las cosas de forma correcta y evitar males mayores.
Solo de esta forma, conseguiremos mantener los datos en orden y evitar males mayores.